Manuel González, técnico, César Núñez, concejal de fiestas y Antonio Morales, técnico. norberto
ana g. valencia | astorga 16/02/2012
La Piñata tampoco se libra de la crisis. El Ayuntamiento ha reducido en un 30% el presupuesto destinado a esta fiesta, de modo que de los 44.000 euros que se gastaron el año pasado, en esta ocasión han puesto el tope en 30.000. Menos charangas, y contratadas a precios más bajos, y pocos fuegos artificiales, son los ingredientes de esta receta que aboga por el ahorro obligado.
El esquema de La Piñata será similar al de años anteriores. «Cuando un formato funciona es mejor no modificarlo», argumentó César Núñez, concejal de fiestas del Ayuntamiento. Los niños abrirán el programa, que comenzará con el desfile infantil, el viernes 24 a las 19.00 horas, después el Arriero Maragato repartirá chocolate entre todos los que vayan disfrazados. Esa noche la ciudad revivirá la década de los 60 y 70.
El Carnaval ha conseguido resucitar a Napoleón, prueba de ello, es que el sábado 25 a las 13.30 horas, el emperador será el encargado de pregonar La Piñata. Como buen magnate lo hará desde el balcón del Ayuntamiento y acompañado de su guardia personal. El desfile de Piñata está programado para las 17.00 horas. Antonio Morales, técnico de cultura, explicó que hay más de 1.000 personas apuntadas. «Hemos recibido cerca de 40 inscripciones, aunque queremos llegar a las cifras de años anteriores que superaban las 60». Tras el desfile se entregarán los premios a los mejores de la fiesta y dará comienzo la verbena de Piñata.
El domingo caerá el telón con el festival de magia. Recuerdan que las entradas pueden adquirirse en la Oficina de Turismo y en las taquillas del Teatro Diocesano la misma tarde de la actuación. La quema de la Piñata a las 23.00 horas en la Plaza Mayor pondrá el broche final a esta edición.
«Un león con máscara». El cartel que anuncia La Piñata vuelve la mirada al Bicentenario de los Sitios. La escultura del León y el Águila de la ciudad aparece disfrazada. El león con una máscara y una cola chispeante recuerda la fiesta a los astorganos. La resurrección de Napoleón y el espectáculo de calle, Le retour de la France, se unen al homenaje de los 200 años.
La Piñata tampoco se libra de la crisis. El Ayuntamiento ha reducido en un 30% el presupuesto destinado a esta fiesta, de modo que de los 44.000 euros que se gastaron el año pasado, en esta ocasión han puesto el tope en 30.000. Menos charangas, y contratadas a precios más bajos, y pocos fuegos artificiales, son los ingredientes de esta receta que aboga por el ahorro obligado.
El esquema de La Piñata será similar al de años anteriores. «Cuando un formato funciona es mejor no modificarlo», argumentó César Núñez, concejal de fiestas del Ayuntamiento. Los niños abrirán el programa, que comenzará con el desfile infantil, el viernes 24 a las 19.00 horas, después el Arriero Maragato repartirá chocolate entre todos los que vayan disfrazados. Esa noche la ciudad revivirá la década de los 60 y 70.
El Carnaval ha conseguido resucitar a Napoleón, prueba de ello, es que el sábado 25 a las 13.30 horas, el emperador será el encargado de pregonar La Piñata. Como buen magnate lo hará desde el balcón del Ayuntamiento y acompañado de su guardia personal. El desfile de Piñata está programado para las 17.00 horas. Antonio Morales, técnico de cultura, explicó que hay más de 1.000 personas apuntadas. «Hemos recibido cerca de 40 inscripciones, aunque queremos llegar a las cifras de años anteriores que superaban las 60». Tras el desfile se entregarán los premios a los mejores de la fiesta y dará comienzo la verbena de Piñata.
El domingo caerá el telón con el festival de magia. Recuerdan que las entradas pueden adquirirse en la Oficina de Turismo y en las taquillas del Teatro Diocesano la misma tarde de la actuación. La quema de la Piñata a las 23.00 horas en la Plaza Mayor pondrá el broche final a esta edición.
«Un león con máscara». El cartel que anuncia La Piñata vuelve la mirada al Bicentenario de los Sitios. La escultura del León y el Águila de la ciudad aparece disfrazada. El león con una máscara y una cola chispeante recuerda la fiesta a los astorganos. La resurrección de Napoleón y el espectáculo de calle, Le retour de la France, se unen al homenaje de los 200 años.
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