viernes, 6 de mayo de 2011

EL EJE MONUMENTAL


Tres millones en el eje monumental

La creación de un mirador y la colocación de una escultura pondrán fin a casi doce años de trabajos



La ordenación del Eje Monumental de Astorga, el corredor que vincula los principales hitos patrimoniales de la ciudad entre la catedral y el jardín de la Sinagoga, está a punto de terminar. El Ayuntamiento instaló ayer en la plaza de San Francisco la estatua dedicada al caminante, labor que se completará con el acondicionamiento de un mirador en el lateral de la capilla de la cofradía de la Santa Vera Cruz y Confalón, la última actuación prevista en el proyecto Alameda. Cabe recordar que ésta fue la propuesta ganadora del concurso de ideas convocado a finales de los años noventa por el consistorio para acondicionar este trazado.
En total, las obras del eje monumental se han prolongado durante casi doce años y han supuesto una inversión superior a los tres millones de euros. El Gobierno central, la Junta de Castilla y León, la Diputación, el Ayuntamiento y la entonces entidad financiera Caja España aportaron en mayor o menor medida financiación para la consecución de este proyecto.
La propuesta ganadora del concurso de ideas para seleccionar la intervención que debía ser realizada en este corredor lo concebía como una alameda, un paseo en el que el protagonista es el peatón. Planteaba dotar al trayecto de altos árboles de ribera que recuerdan la imagen de un río que fluye a lo largo de la ciudad. Además, el eje fue urbanizado con pavimentos muy planos y continuos, convertidos en superficies amplias para el paseo en las que se distingue la calzada de la acera por el cambio de materiales y colores, no por la diferencia en altura, que es prácticamente inexistente. Finalmente, las plazas que se asientan sobre este trazado fueron concebidas como el remanso de este río imaginario, en las que el ciudadano podría disfrutar del descanso.
El alcalde de Astorga, Juan José Alonso Perandones consideró ayer que, al margen de las actuaciones previstas y ya ejecutadas en el proyecto Alameda, «sería necesaria una ampliación del eje monumental» en una fase más. Ésta permitiría, indicó el regidor, mejorar la calle Doctor Mérida Pérez, que comunica la parte lateral y trasera de la catedral con el parque del Aljibe, así como buscar una solución alternativa a las escaleras metálicas que desde este vial dan acceso al parque de El Megar. En cualquier caso, Perandones planteó esta cuestión como un asunto a abordar por próximas corporaciones municipales.

La plaza de Eduardo de Castro y «Las Edades del Hombre»


La mejora de la plaza de Eduardo de Castro comenzó meses antes de la celebración en Astorga de la exposición «Las Edades del Hombre», que tuvieron lugar en el año 2000. Acondicionar el entorno en el que se asentaban las dos sedes de la muestra, la catedral y el palacio de Gaudí, fue una necesidad considerada perentoria por el equipo de gobierno de entonces. La intervención no estuvo exenta de ciertos problemas con la empresa adjudicataria, aunque finalmente los trabajos en este emblemático espacio fueron rematados.

Santocildes: la fuente como oasis



La aspiración de numerosos astorganos de contar con una fuente se vio colmada en la plaza de Santocildes. El acondicionamiento de este espacio en el marco de la creación del eje permitió instalar posteriormente este elemento, como contrapunto al toque pétreo y seco de la cercana plaza Mayor.

San Bartolomé, completada con un miliario


La intervención en el eje monumental comenzó en el segundo semestre de 1999. Afectó a la plaza de Eduardo de Castro, la calle los Sitios, la plaza Obispo Alcolea, la calle Lorenzo Segura, la plaza de Santocildes, la de San Bartolomé (en la imagen, con el miliario), la calle de los Padres Redentoristas y la plaza de San Francisco.

El caminante resurge en la plaza de San Francisco

06/05/2011  

El mirador de la plaza de San Francisco será dotado de mobiliario urbano. Su ejecución está presupuestada en 40.405 euros. A escasos metros era colocada ayer la estatua «Quo Vadis», realizada en bronce y que sustituye a la de Sendo que fue quemada intencionadamente en el 2006.

La nueva estatua, financiada en parte por una cuestación popular, tiene 600 kilos de peso y 2,7 metros de altura. La idea y la ejecución de la obra original costarán 15.000 euros, a los que hay que sumar otros 26.000 de la fundición de la escultura.


 


No hay comentarios:

Publicar un comentario